Lo que sí es violencia política en contra de las mujeres por cuestiones de género:

  • Insinuaciones respecto de su vida personal y laboral basada en estereotipos y roles de género, por ejemplo: es una promiscua, prostituta.
  • Una mujer, durante su encargo, denuncia hostigamiento por parte de sus superiores o colegas, quienes le exigen que renuncie a su puesto, argumentando que ese lugar le corresponde a alguien más capacitado: un hombre.
  • Tras un proceso de selección para ocupar un cargo público, mujeres y hombres compiten en igualdad de condiciones; pero hay un elemento que consideran determinante para rechazar a la mujer y elegir al hombre: un embarazo.
  • Una candidata a ocupar un cargo de elección popular es caricaturizada por su aspecto físico, sexualizándola y mostrando atributos estereotipados de género.
  • Una mujer que ocupa un cargo de decisión es exhibida teniendo relaciones sexuales con un colaborador.
  • Comentarios hechos por parte de compañeros (diputados, senadores, consejeros, magistrados, etc.) basados en el cuerpo de la mujer, mientras se encuentra en una reunión de trabajo.
  • Compañeras de trabajo exponen vida familiar de una colega, con el objetivo de intimidarla y provocar reacciones que favorezcan sus intereses.
  • Injerencias arbitrarias y abusivas en el desempeño de sus funciones.
  • Amenazas a la integridad personal.
  • Negación de información, que incluye no informar sobre la realización de las sesiones del Concejo Municipal, impidiéndoles participar en los procesos de toma de decisiones.
  • Presión para que cedan espacios de representación del Concejo Municipal ante otras instancias.
  • Desestimación, ridiculización y descalificación pública de las propuestas presentadas por las mujeres, especialmente cuando éstas están relacionadas con la promoción de los derechos de las mujeres.
  • Negación de la participación de las mujeres en las sesiones del Concejo Municipal, obligándolas sólo a firmar actas, aun cuando no hubieran participado.
  • Amenazas de separación por parte de su pareja.
  • Amenazas económicas por parte de su pareja o familia.
  • Obligar a las mujeres a hacer favores sexuales a cambio de una postulación.
  • "Pornografía vengativa".
  • Amenazas para votar por un determinado partido.

Observatorio de Participación Política de las Mujeres en Puebla